El Athletic consiguió el pasado sábado un importante punto en la Rosaleda, después de estrenarse en liga el nuevo Petro-Málaga ante los leones. Punto importante por cómo se puso el partido: ninguno de los dos equipos puso mucho fútbol, ambos equipos ofrecieron un juego lento y pobre y los dos balones llegaron como suelen llegar en estos casos, sobre todo en el caso del Athletic: a balón parado.
Después de un partido sin mucha historia, con pocas ocasiones y muchos bostezos, el debutante en nuestra liga Demichelis, cedido nada más y nada menos que por el Bayern de Múnich, fue el que anotó el primer tanto del partido a la salida de un córner allá por el minuto 83. Gran mazazo para los leones que, después de el juego pobre del Málaga, se vieron por detrás en el luminoso.
Pero el Athletic no se rindió. Siguió jugando con esa casta que tanto nos caracteriza y Javi Martínez, el mejor de los leones, remató un centro preciso en un saque de falta de Gabilondo en el minuto 93, última jugada del partido.
El marcador no se movió y, por tanto, reparto de puntos en La Rosaleda. Un reparto de punto justo en un partido en el que al final no brilló ni la cartera, ni la cantera.
Por cierto, en el Athletic debutó el cachorro Borja Ekiza debido a las múltiples bajas que teníamos en defensa. El central hizo un gran partido, cometió muy pocos errores y demostró por qué Caparrós confió en él; puede, incluso, que fuera el mejor defensa rojiblanco, así que no sorprendería verle jugando el siguiente partido ante el Racing. Un producto más de la cantera, que parece que sigue dando sus valiosísimos frutos.
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